LA RIOJA.- Los trabajadores de la salud pública de La Rioja convocaron a un paro de 72 horas y a movilizaciones para esta semana, en rechazo a la propuesta oficial de incremento salarial que consideran insuficiente.
Los profesionales de la Salud, agremiados en la Asociación de Profesionales de la Salud de La Rioja (Aproslar), cumplieron la semana pasada un paro de 48 horas con alto nivel de adhesión para reclamar un aumento que lleve sus sueldos a 10.000 pesos.
Los trabajadores del sector nucleados en la Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina de La Rioja harán un paro el miércoles en repudio a los avasallamientos y el maltrato del ministro de Salud local, Marco Perera.
El reclamo básico de los médicos es que el Ministerio de Salud cumpla con lo prometido hace dos meses: otorgar un aumento que lleve sus sueldos a 10.000 pesos, pero el gobierno riojano dice que no puede y ofrece incrementos que van del 27 al 34%.
En asambleas realizadas el miércoles, los profesionales de la salud rechazaron la propuesta oficial y endurecieron las medidas, por lo que se decidió concretar un paro de 72 horas para los días martes 10, miércoles 11 y jueves 12.
Nicolás De la fuente, secretario general de ATSA, sostuvo en las últimas horas que "el 80% de los coordinadores de los centros de salud renunciaron y no hay insumos".
En el interior de la provincia "el sistema público de salud, que en muchos casos es el único que existe, atraviesa por una crítica situación", expresó el gremialista.
En Chepes, 250 kilómetros al sureste de la capital, los vecinos denunciaron que no pueden hacer funcionar ninguna ambulancia porque "no tienen neumáticos en condiciones".
Esto supone que "para hacer derivaciones de enfermos, hay que pedir prestadas ambulancias a otros pueblos cercanos. Entonces estamos haciendo una colecta para comprar gomas", relató De la fuente.
El ministro de Salud, que asumió hace dos meses, prometió llevar los sueldos de los médicos a 10 mil pesos, pero en la actual negociación salarial fue dejado de lado por el ministro de Gobierno, Claudio Saúl.
El funcionario comenzó por recorrer "de sorpresa" y con un "enfermo fantasma que tenía una cámara oculta" centros de salud del Estado en la capital y el interior, para verificar lo que estaba ocurriendo.
Como conclusión, denunció la ausencia de los médicos en los servicios en sus horarios de trabajo, por ejemplo en Chepes, y fue acusado por los gremialistas por distintas formas de "maltrato". (DYN)